La Diputación de Castellón ha asumido en los presupuestos aprobados para 2012 la primera reducción del gasto corriente de la última década al disminuirlos más de un millón y medio de euros. Este esfuerzo en el control de las cuentas de bajar de 15.985.920 a 14.401.869 euros supone un ajuste del 10%.
Esta es una partida que, en consonancia con la economía y con la ambición de multiplicar las garantías sociales, había ido subiendo desde los 9,8 millones de euros de 2003 hasta los casi 16 millones de euros de 2011. Sin embargo, la reducción de las aportaciones del Estado por la crisis, que son la principal fuente de ingresos de la institución provincial, ha obligado a cambiar esta tendencia, pero sin afectar a la esencia de lo que aporta la Diputación.
Se trata de partidas del gasto corriente no comprometidas presupuestariamente, que hacen referencia, principalmente, a gastos de servicio de asesoramiento técnico externo, mantenimiento y de representación o protocolarios.
Este dato refleja la nueva realidad económica española, que el presidente de la Diputación, Javier Moliner, ha decidido afrontar para permitir que Castellón salga antes y más fuerte de la crisis económica que está sufriendo toda España. En este sentido, hay que tener en cuenta que la Diputación ha aprobado los presupuestos más bajos de la última década.
Los 116 millones que ayer aprobó la Diputación son un 14% inferiores a los que se aprobaron en 2003 y un 31% inferiores a los 167 millones que se aprobaron hace solo tres años correspondientes a las cuentas de 2009. Sin embargo, la Diputación ha hecho el esfuerzo de refrendar su compromiso con los ayuntamientos, con sus trabajadores y con sus proveedores primando, aún más, el control en el gasto y haciendo inversiones más eficientes, que permitan que se multiplique el dinero invertido.
En este sentido, el vicepresidente económico, Miguel Barrachina, ya destacó en su defensa de estas cuentas para 2012 que lo que la Diputación aprobó ayer no era un “proyecto de presupuestos, sino un proyecto de provincia, que ponga los cimientos para el despegue de Castellón a corto plazo y consolide el crecimiento a largo plazo”.
En concreto, los presupuestos de 2012 serán de 116.261.975 euros, cifra que incluye una reducción en el capítulo de gastos corrientes del 8,82% hasta situarlos en los 11,3 millones de euros. La reducción se traslada a los presupuestos de todos los organismos autónomos que forman parte del organigrama de la institución provincial. Así el Patronato Provincial de Turismo reducirá sus cuentas un 7,5%, el Instituto de Promoción Cerámica un 4,3%, el Instituto de Deportes un 23,4% y la Escuela Taurina un 28,8%.
Entre las eliminaciones presupuestarias se encuentran la partida de 80.000 euros para merchandising, que se ha suprimido, así como la tradicional fiesta de Santa Rita (20.000 euros) y la Cena del Día de la Provincia (80.000 euros). También se eliminan completamente los más de 150.000 euros en gastos de promoción, protocolo y difusión de diferentes organismos pertenecientes a la institución provincial. También se suprime la partida dedicada a la compra de plantas ornamentales que ascendía a 120.000 euros.
Las políticas de contención del gasto impulsadas por Javier Moliner y su equipo de gobierno, además, van a permitir reducir el endeudamiento neto de la institución provincial en 20,2 millones de euros desde junio de 2011 hasta el 31 de diciembre de 2012.
